lunes, 28 de diciembre de 2015

PALABRAS DEL ALMA
Sueños de semilla
Cada semilla sabe cómo llegar a ser árbol. Y tantas son las semillas como son los sueños secretos. dentro de nosotros, innumerables sueños esperan el tiempo de germinar, echar raíces y darse a luz, morir como semillas... para convertirse en árboles. Lo soñado nos enseña, dormidos o despiertos, a vernos, a escucharnos, a darnos cuenta.

JORGE BUCAY

jueves, 15 de octubre de 2015

LOS TRENES DE BOMBAY
Los trenes de Bombay, que transportan a seis millones de pasajeros por día, violan las leyes de la física: En ellos entran muchos más pasajeros que en ellos caben.
Suketu Mehta, que sabe de esos viajes imposibles, cuenta que cuando ya ha partido cada tren repletísimo, hay quienes lo persiguen corriendo. Quien pierde el tren, pierde el empleo.
Y entonces, de los vagones, brotan brazos que salen por las ventanillas o cuelgan desde los techos, y ayudan a trepar a los rezagados. Y esos brazos del tren no preguntan al que viene corriendo si es extranjero o nació aquí, ni le preguntan qué lengua habla, ni si cree en Brahma o en Alá, en Buda o en Jesús, ni le preguntan a qué casta pertenece, o si es de casta maldita o de ninguna casta.
Eduardo Galeano

miércoles, 7 de octubre de 2015

"La alegría nos libera para hacer cualquier cosa, nos permite volar con la imaginación, e inventar cosas nuevas, atrae a la gente, abre puertas, disuelve rencores y resentimientos, permite olvidar las penas y minimizar las adversidades"
"Acepta lo que venga a ti entretejido en el diseño de tu destino, porque ¿Qué podría ser más adecuado a tus necesidades? MARCO AURELIO

lunes, 28 de septiembre de 2015

FRAGMENTO DE LA ULTIMA CARTA DE EINSTEIN A SU HIJA


Cuando propuse la teoría de la relatividad, muy pocos me entendieron, y lo que te revelaré ahora para que lo transmitas a la humanidad también chocará con la incomprensión y los perjuicios del mundo. Te pido aun así, que la custodies todo el tiempo que sea necesario, años, décadas, hasta que la sociedad haya avanzado lo suficiente para acoger lo que te explico a continuación.
Hay una fuerza extremadamente poderosa para la que hasta ahora la ciencia no ha encontrado una explicación formal. Es una fuerza que incluye y gobierna a todas las otras, y que incluso está detrás de cualquier fenómeno que opera en el universo y aún no haya sido identificado por nosotros. Esta fuerza universal es el amor.
Cuando los científicos buscaban una teoría unificada del universo olvidaron la más invisible y poderosa de las fuerzas.
El amor es luz, dado que ilumina a quien lo da y lo recibe. El amor es gravedad, porque hace que unas personas se sientan atraídas por otras. El amor es potencia, porque multiplica lo mejor que tenemos, y permite que la humanidad no se extinga en su ciego egoísmo. El amor revela y desvela. Por amor se vive y se muere. El amor es Dios, y Dios es amor.
Esta fuerza lo explica todo y da sentido en mayúsculas a la vida. Ésta es la variable que hemos obviado durante demasiado tiempo, tal vez porque el amor nos da miedo, ya que es la única energía del universo que el ser humano no ha aprendido a manejar a su antojo.
Para dar visibilidad al amor, he hecho una simple sustitución en mi ecuación más célebre. Si en lugar de E= mc2 aceptamos que la energía para sanar el mundo puede obtenerse a través del amor multiplicado por la velocidad de la luz al cuadrado, llegaremos a la conclusión de que el amor es la fuerza más poderosa que existe, porque no tiene límites.
Tras el fracaso de la humanidad en el uso y control de las otras fuerzas del universo, que se han vuelto contra nosotros, es urgente que nos alimentemos de otra clase de energía. Si queremos que nuestra especie sobreviva, si nos proponemos encontrar un sentido a la vida, si queremos salvar el mundo y cada ser sintiese que en él habita, el amor es la única y la última respuesta.
Quizás aún no estemos preparados para fabricar una bomba de amor, un artefacto lo bastante potente para destruir todo el odio, el egoísmo y la avaricia que asolan el planeta. Sin embargo, cada individuo lleva en su interior un pequeño pero poderoso generador de amor cuya energía espera ser liberada.
Cuando aprendamos a dar y recibir esta energía universal, querida Lieserl, comprobaremos que el amor todo lo vence, todo lo trasciende y todo lo puede, porque el amor es la quintaesencia de la vida.
Lamento profundamente no haberte sabido expresar lo que alberga mi corazón, que ha latido silenciosamente por ti toda mi vida. Tal vez sea demasiado tarde para pedir perdón, pero como el tiempo es relativo, necesito decirte que te quiero y que gracias a ti he llegado a la última respuesta.

Tu padre. ( Albert Einstein)
LA INVITACIÓN 


          "No me interesa lo que haces para ganarte la vida. Yo quiero saber qué te duele, y si te atreves a soñar con satisfacer las ansias de tu corazón. NO me interesa cuántos años tienes. Yo quiero saber si te arriesgarías a verte como un tonto por amor, por tus sueños, por la aventura de estar vivo.
          No me interesa que planetas circundan tu luna. quiero saber si has tocado el centro de tu propia tristeza, si te has abierto a las traiciones de la vida o te has encerrado y marchitado por el miedo a volver a sufrir. Quiero saber si estás dispuesto a sentarte con el miedo, el mío o el tuyo propio, sin intentar esconderlo, o disminuirlo o resolverlo. 
          Quiero saber si estás dispuesto a estar con la alegría, la mía o la tuya propia, si puedes bailar con lo salvaje y permitir que el éxtasis te llene el cuerpo desde la punta de la cabeza hasta la punta de los pies sin advertirnos que tengamos cuidado, que seamos realistas o recordemos las limitaciones de los seres humanos. No me interesa si la historia que me cuentas es cierta. Yo quiero saber si estás dispuesto a decepcionar a otro para ser auténtico contigo mismo, si puedes soportar la acusación de traición y no traicionar tu propia alma. 
          Yo quiero saber si puedes ser fiel y, por lo tanto, confiable. Yo quiero saber si puedes ver la belleza, incluso cuando no es lindo todos los días y si puedes llenar tu vida con la presencia de Dios. Quiero saber si puedes vivir con los fracasos, los tuyos y los míos, y aun así pararte a la orilla de un lago y gritarle a la luna plateada, ¡Sí!
          No me interesa saber dónde vives o cuánto dinero tienes. Yo quiero saber si te puedes levantar después de una noche de dolor y desesperación, agotado y estropeado hasta los huesos y hacer lo que se tenga que hacer por los niños. No me interesa saber quién eres o como llegaste aquí. Quiero saber si te pararás conmigo en el medio del fuego sin echar para atrás. 
          No me interesa saber dónde o con quién estudiaste. Quiero saber qué te sostiene desde adentro cuando todo parece desmoronarse. Yo quiero saber si puedes estar sólo contigo mismo y si realmente disfrutas de la compañía que tienes en los momentos vacíos." 


                                                   ORIAH MOUNTAIN DREAMER 

jueves, 24 de septiembre de 2015

SER TU MISMO
          Hay sólo un único momento en el cual puedes tener éxito en ser quien eres, y es ahora. La autenticidad es la única cualidad que no puedes organizar de antemano. Cuando ensayas quién serás, pierdes a quien eres en realidad. El amor, nuestra verdadera naturaleza, se expresa a sí mismo en este mismo instante. 
          Si estás pensando en qué dirás, no es la verdad. Tan ansiosa preparación es un intento de diseñar una imagen para evitar ser juzgado por deficiencias percibidas. Si reconoces que ya tienes dentro de ti lo que necesitas para manejar cualquier situación, puedes presentarte en cualquier lugar en cualquier momento sin ensayo previo. Si te basas en la fuerza del momento, puedes superar la ansiedad y adjudicarte el éxito que deseas. 
          El camio para escapar de las preocupaciones sobre el futuro consiste en sumergirse completamente en el presente. Si puedes estar totalmente aquí ahora, cuando "luego" se convierta en "ahora", sabrás exactamente qué hacer y pondrás de manifiesto resultados que les servirán a todos. 
                                        ALAN COHEN 

miércoles, 16 de septiembre de 2015

La mujer total no es blanda ni dura.
No es sumisa ni dominante.
La mujer total es como un río.
Ella es clara y flexible.
Ella es consciente plenamente de su importancia y de su singularidad .
Ella es la portadora de la vida.
Ella es activa y dando forma.

Para vivir la feminidad total ella necesita de ser consciente de su objetivo en la vida y del propósito de su vida. Descubrir el origen genético, alcanzar el objetivo de su vida, para conocer el sentido de su vida.

La mujer total es consciente de su singularidad, brilla, es una alegría y una luz para los demás.

 ( Hellinger, 2015)
FÁBULA DE LA PROFESORA
Una profesora en clase saca de su cartera un billete de 20 euros y lo enseña a sus alumnos a la vez que pregunta: "¿A quién le gustaría tener este billete?".
Todos los alumnos levantan la mano.
Entonces la profesora coge el billete y lo arruga, haciéndolo una bola. Incluso lo rasga un poquito en una esquina. "¿Quién sigue queriéndolo?". Todos los alumnos volvieron a levantar la mano.
Finalmente, la profesora tira el billete al suelo y lo pisa repetidamente, diciendo: "¿Aún queréis este billete?".
Todos los alumnos respondieron que sí.
Entonces la profesora les dijo:
"Espero que de aquí aprendáis una lección importante hoy. Aunque he arrugado el billete, lo he pisado y tirado al suelo... todos habéis querido tener el billete porque su valor no había cambiado, seguían siendo 20 euros. Muchas veces en la vida te ofenden, hay personas que te rechazan y los acontecimientos te sacuden, dejándote hecho una bola o tirado en el suelo. Sientes que no vales nada, pero recuerda, tu valor no cambiará NUNCA para la gente que realmente te quiere. Incluso en los días en los que sientas que estás en tu peor momento, tu valor sigue siendo el mismo, por muy arrugado que estés",
(Cuento de Coaching Emocional)

martes, 15 de septiembre de 2015

¿Dónde está el espíritu?
Se me mostró un profundo pozo oscuro, y en la parte superior había un cubo atado a una cuerda. Vi cómo el cubo era introducido en el pozo, y al sacarlo de la oscuridad estaba lleno a rebosar de un agua clara y pura.
Oí estas palabras: En lo profundo de cada alma se encuentra la pureza del Espíritu. Toma tiempo para buscarla hasta que la encuentres, y a continuación, sácala.
La Voz Interior (Eileen Caddy)

lunes, 14 de septiembre de 2015

SOLO SIENTE
Si de pronto todo te parece oscuro y confuso, y no sabes hacia donde dirigir tus pasos, no trates de entender y solo siente! Si a veces tus problemas te agobian y no encuentras la solución, no trates de entender y solo siente! Si frecuentemente llegan a tu mente pensamientos extraños y amenazantes, que te hacen dudar de tu valor y tu capacidad, no trates de entender y solo siente! Recuerda que la mente se equivoca y el corazón siempre acierta, y que si te das permiso de sentir y fluir, tu sabiduría interior te conducirá hacia nuevos y maravillosos caminos que te harán muy feliz!
El vaso de agua
Una psicóloga en una sesión grupal levantó un vaso de agua, todo el mundo esperaba la pregunta: ¿Está medio lleno o medio vacío? -sin embargo, ella preguntó: ¿Cuánto pesa este vaso?.
Las respuestas variaron entre 200 y 250 gramos. Pero la psicóloga respondió: "El peso absoluto no es importante, depende de cuánto tiempo lo sostengo. Si lo sostengo 1 minuto, no es problema. Si lo sostengo una hora, me dolerá el brazo, si lo sostengo un día, mi brazo se entumecerá y paralizará. El peso del vaso no cambia, pero cuanto más tiempo lo sujeto, más pesado se vuelve". Y continuó: "Las preocupaciones son como el vaso de agua. Si piensas en ellas un rato, no pasa nada. Si piensas un poco más empiezan a doler, y si piensas en ellas todo el día, acabas sintiéndote paralizado, incapaz de hacer nada". ¡Acuérdate de soltar el vaso!
(Educación Emocional)

martes, 8 de septiembre de 2015

"Mujeres que corren con lobos", Clarissa Pinkola,
Dicen que todo lo que nosotros estamos buscando también nos busca a nosotros y que si nos quedamos quietos nos encontrará.

martes, 1 de septiembre de 2015

PERSIGUE   TU  SUEÑO
Busca dentro de ti y descubre qué da sentido a tu vida.            Entonces, déjate la piel en ello, porque merece la pena. No importa las veces que te sientas abatido o te caigas, si te sientes cansado o que te falta el aliento. Solo hay una vía y es ver en cada una de esas ocasiones una oportunidad, un empujón para levantarte y volver a empezar. Apóyate en las personas que te generan confianza, en tus valores y principios. Pueden ser muy exigentes, pero serán buenas muletas para llegar a tu meta.
Será necesario aprender a no escuchar a quienes quieren matar los sueños de los demás. Si quieres formar parte de algo, persigue tu sueño, porque eso te alejará de la mediocridad. Los vencedores no dejan de creer en sí mismos.
“Nunca dejes que nadie te diga que no puedes hacer algo, ni siquiera yo. Si tienes un sueño, tienes que protegerlo. Las personas que no son capaces de hacer algo te dirán que tú tampoco puedes. Si quieres algo, ve por ello, y punto” (En busca de la felicidad, film de Gabriele Muccino).

“Si te atrae una lucecita, ¡Siguela! Que te conduce a un pantano… Ya saldrás. Pero si no la sigues, toda la vida te martirizarás pensando que quizá era tu estrella”, Cleóbulo de Lindos. 
MOSTRAR APRECIO

Lo contrario del amor no es el odio. Lo contrario del amor es la indiferencia”. Esta frase del escritor Elie Wiesel puede aplicarse a todo tipo de relaciones. Si uno no siente más que indiferencia hacia el otro, prescinde de él. La consideración hacia el otro se demuestra en una actitud de respeto y aprecio. Son dos maneras de ver.
“Respeto” viene de respicere, mirar al otro una vez más. A veces en la vida cotidiana me cruzo con el otro sin prestarle atención, me detengo, le miro otra vez y me fijo en él de nuevo. El respeto significa también tener consideración, dirigir nuevamente la mirada a él y contemplarle. No me cruzo con él como si no le viera. Doy media vuelta y le miro.
El verbo alemán anisen, “mirar”, tiene un significado muy profundo. Mirar a uno es mostrarle consideración y estima. Al mirarle le manifiesto mi aprecio. Valoro sus cualidades, su dignidad, su irrepetible individualidad. Pero este aprecio no debe mostrarse solo con miradas. El otro necesita mis palabras agradables que le hagan creer en sus valores.

Lo contrario de la belleza no es la fealdad, es la indiferencia. Lo contrario de la fe no es herejía, es la indiferencia. Y lo contrario de la vida no es la muerte, sino la indiferencia entre la vida y la muerte. 
¿CREE EN LAS CASUALIDADES?

¿Cómo explica lo siguiente?
Abraham Lincoln fue elegido para el Congreso de los Estados Unidos de América en 1846, John F. Kennedy en 1946.
Lincoln fue elegido presidente en 1861, Kennedy en 1961.
Los dos se caracterizaron por su lucha en favor de los derechos civiles. Sus esposas perdieron un hijo mientras vivían en la Casa Blanca. La secretaria de Kennedy se apellidaba Lincoln y el de Lincoln, Kennedy. A los dos presidentes les asesinaron un viernes y a ambos con un tiro en la cabeza; sus asesinos eran del sur. El de Lincoln, John Wilkes Booth, nació en 1839, y el de Kennedy, Lee Harvey Oswald, en 1939. Booth disparó en un teatro y fue capturado en un almacén. Oswald disparó desde un almacén y fue capturado en un teatro. Booth y Oswald fueron asesinados sin juicio alguno.
         Y, por último, porque todavía hay más coincidencias, los sucesores de ambos presidentes se apellidaban Johnson. Andrew Johnson, sucesor de Lincoln, y Lyndon B. Johnson, sucesor de Kennedy. Andrew nació en 1808 y Lyndon en 1908.

         A esta sarta de casualidades el matemático John Allen Paulos la llama “evidencia conspiracional”. Y este es su ejemplo preferido para hablar del tema. 

lunes, 31 de agosto de 2015

CIERRA   LOS   OÍDOS

Un anciano y un niño viajaban con un burro. Caminaban junto al asno cuando pasaron por un pueblo. Un grupo de niños se rió: “¡Qué tontos! Tienen un burro y van andando. Al menos el viejo podría montar”.
El anciano se subió al burro y siguieron. Al pasar otro pueblo, algunos se indignaron al ver al viejo sobre el burro y dijeron: “Parece mentira. El viejo cómodamente sentado y el pobre niño caminando”. Viejo y niño intercambiaron puestos. Y en la siguiente aldea la gente comentó: “¡Es intolerable! El chico sentado y el anciano andando”. Ambos se subieron al burro. Poco después un grupo de campesinos les vieron y dijeron: “¡Es vergonzoso! Vais a reventar al animal”.
El viejo y el niño determinaron cargar el burro sobre sus hombros. Entonces la gente se mofaba: “¡Qué bobos! Tienen un burro y en lugar de montarlo, lo llevan a cuestas”.

De repente, el burro se desplomó por un barranco, hallando la muerte. El viejo instruyó al muchacho: “Querido mío, si escuchas las opiniones de los demás y les haces caso, acabarás más muerto que este burro. ¿Sabes qué te digo? Cierra tus oídos a la opinión ajena. Que lo que los demás dicen te sea indiferente. Escucha solo la voz de tu corazón. 

miércoles, 26 de agosto de 2015

PRECIOSO POEMA DE JOSÉ SARAMAGO

¿Qué cuántos años tengo?
-¡Qué importa eso!
¡Tengo la edad que quiero y siento!
La edad en que puedo gritar sin miedo lo que pienso.
Hacer lo que deseo, sin miedo al fracaso o lo desconocido…
Pues tengo la experiencia de los años vividos y la fuerza de la convicción de mis deseos.
¡Qué importa cuántos años tengo!
¡No quiero pensar en ello!
Pues unos dicen que ya soy viejo, otros “que estoy en apogeo”.
Pero no es la edad que tengo, ni lo que la gente dice, sino lo que mi corazón siente y mi cerebro dicte.
Tengo los años necesarios para gritar lo que pienso, para hacer lo que quiero, para reconocer yerros viejos, rectificar caminos y atesorar éxitos.
Ahora no tienen por qué decir: ¡Estás muy joven, no lo lograrás!... ¡Estás muy viejo, ya no podrás!...
Tengo la edad en que las cosas se miran con más calma, pero con el interés de seguir creciendo.
Tengo los años en que los sueños, se empiezan a acariciar con los dedos, las ilusiones se convierten en esperanza.
Tengo los años en que el amor, a veces es una loca llamarada, ansiosa de consumirse en el fuego de una pasión deseada. Y otras… es un remanso de paz, como el atardecer en la playa…
¿Qué cuántos años tengo?  No necesito marcarlos con un número, pues mis anhelos alcanzados, mis triunfos obtenidos, las lágrimas que por el camino derramé al ver mis ilusiones truncadas… ¡Valen mucho más que eso!
¡Qué importa si cumplo cincuenta, sesenta o más! Pues lo que importa: ¡es la edad que siento!
Tengo los años que necesito para vivir libre y sin miedos.
Para seguir sin temor por el sendero, pues llevo conmigo la experiencia adquirida y la fuerza de mis anhelos.
 ¿Qué cuántos años tengo?
 ¡Eso!... ¿A quién le importa?
Tengo los años necesarios para perder ya el miedo y hacer lo que quiero y siento!!
Qué importa cuántos años tengo.
O cuántos espero, si con los años que tengo,

¡¡Aprendí a querer lo necesario y a tomar, sólo lo bueno!! 

lunes, 27 de julio de 2015

LAS CUATRO LEYES ESPIRITUALES
 "En la INDIA se enseñan las "Cuatro Leyes de la Espiritualidad" La primera dice: "La persona que llega es la persona correcta", es decir que nadie llega a nuestras vidas por casualidad, todas las personas que nos rodean, que interactúan con nosotros, están allí por algo, para hacernos aprender y avanzar en cada situación. La segunda ley dice: "Lo que sucede es la única cosa que podía haber sucedido". Nada, pero nada, absolutamente nada de lo que nos sucede en nuestras vidas podría haber sido de otra manera. Ni siquiera el detalle más insignificante. No existe el: "si hubiera hecho tal cosa hubiera sucedido tal otra...". No. Lo que pasó fue lo único que pudo haber pasado, y tuvo que haber sido así para que aprendamos esa lección y sigamos adelante. Todas y cada una de las situaciones que nos suceden en nuestras vidas son perfectas, aunque nuestra mente y nuestro ego se resistan y no quieran aceptarlo. La tercera dice: "En cualquier momento que comience es el momento correcto". Todo comienza en el momento indicado, ni antes, ni después. Cuando estamos preparados para que algo nuevo empiece en nuestras vidas, es allí cuando comenzará. Y la cuarta y última: "Cuando algo termina, termina". Simplemente así. Si algo terminó en nuestras vidas, es para nuestra evolución, por lo tanto es mejor dejarlo, seguir adelante y avanzar ya enriquecidos con esa experiencia. Creo que no es casual que estén leyendo esto, si este texto llegó a nuestras vidas hoy; es porque estamos preparados para entender que ninguna gota de lluvia cae alguna vez en el lugar equivocado

miércoles, 22 de julio de 2015

¿Eres tan feliz como tu perro?

En uno de mis talleres, un hombre confesó:
 "¡Durante muchos años fui tan desdichado que todos los días rogaba a Dios que me permitiera levantarme tan feliz como mi perro!
Observando a mi perro... Está todo el tiempo contento. Es la criatura más alegre que jamás haya visto. Vive en un estado de deleite permanente.
Deduje que él sabía algo que yo no (o que, al menos, no recordaba), y decidí estudiar su actitud y sus actividades con la esperanza de que yo también, algún día, pudiera despertar tan feliz como él.
La clave de su felicidad es que vive totalmente en el aquí y el ahora. No tiene sentido de pasado ni de futuro, y está plenamente presente en lo que está pasando. Él se entusiasma con lo que se cruce en su camino"

ALAN COHEN

martes, 21 de julio de 2015


Nuestro mayor temor no consiste en no ser adecuados. Nuestro mayor temor consiste en que somos poderosos más allá de toda medida. Es nuestra luz y no nuestra oscuridad lo que nos atemoriza. Nos preguntamos: “¿Quién soy yo para ser brillante, espléndido, talentoso, fabuloso?”
         Pero, en realidad, ¿Quién eres tú para no serlo? Eres hijo de Dios. Tus pequeños juegos no sirven al mundo. Disminuirte a ti mismo para que los demás no se sientan inseguros a tu lado no tiene nada que ver con la iluminación.
Todos estamos hechos para brillar, como brillan los niños. Nacemos para manifestar esta gloria del Dios que está dentro de nosotros.
Y no es que esté sólo en algunos; está en todos nosotros. En la medida en que dejamos que brille nuestra propia luz, damos a otros permiso para hacer lo mismo.
En la medida en que nos liberamos de nuestro temor, nuestra presencia libera automáticamente a otros.


Nelson Mandela